Quinta etapa del año litúrgico

Pascua

El Tiempo de Pascua

Es el tiempo que utilizamos para meditar lo que Cristo hizo por nosotros por medio de su pasión, muerte y resurrección. Asimismo, tratamos de ver qué significa la muerte de Jesús y de qué manera recibimos y vivimos su  resurrección. Algunas veces se comienza el día Jueves Santo con la celebración de la Última Cena de Jesús con sus discípulos, siguiendo el rito hebreo antiguo o con el rito del lavado de los pies según aparece en el Evangelio de Juan. Luego, el Viernes Santo, se recuerda la muerte de Jesús en la cruz, compenetrándonos con su dolor, sufrimiento y amor por la humanidad. En señal de tristeza y luto no se cantan el Gloria ni el Aleluya (tampoco se hace durante toda la Cuaresma), ni tampoco se tocan las campanas. La iglesia se viste totalmente de Negro, tapando o sacando todos los adornos y símbolos en señal de luto. En el Sábado Santo o Vigilia Pascual nos preparamos para recibir pacientemente la resurrección el día domingo.

Pascua de Resurrección es la fiesta más grande y solemne del Calendario Eclesiástico en la cual celebramos, con alegría y júbilo, que nuestro Señor ha vencido al pecado y a la muerte por medio de su resurrección. Es la fiesta central de la fe cristiana. Celebración de la vida en abundancia, de la esperanza, de la victoria de la vida sobre la muerte. Fiesta de alegría, de resurrección. Está ligada también a la fiesta de Pascua de los judíos (Pésaj), que conmemora la liberación de la esclavitud en Egipto. De aquí que para los cristianos la Pascua también significa Liberación, en cuanto somos liberados de las ataduras del pecado y de la muerte y resucitados por la fe en nuestro Señor Jesucristo. En el domingo de Pascua comienza el Tiempo de Pascua, y en donde en un período total de 7 semanas o domingos, asumimos que somos el pueblo de la resurrección y que nuestra vida eterna comienza hoy, cuando creemos en la vida que Dios nos ha regalado por medio de Jesús. La última semana del tiempo de Pascua se celebra la fiesta de la Ascensión de Nuestro Señor, que se fecha exactamente 40 días después del Domingo de Pascua. En este día recordamos que Jesús está sobre nosotros y es el único que ha resucitado y que puede interceder  por nosotros ante Dios, porque se encuentra a su derecha. Así como se fue y “subió al cielo”, un día Él volverá en gloria y majestad, trayendo consigo el Reino definitivo. Esto es conocido como la Segunda Venida de Cristo (o Parusía), día que todo cristiano espera con fe y en donde seremos de una vez resucitados juntos, tanto vivos como muertos, y llevados a la vida eterna. Luego del día de la Ascensión vendrá el 7mo y último domingo de Pascua, ya preparando el camino para celebrar el próximo domingo la fiesta de Pentecostés. La fiesta de la Pascua, entonces, determina el calendario móvil de otras fiestas: así la Ascensión (el ascenso de Jesús al cielo) se celebra 40 días después y Pentecostés 10 días después del día de la Ascensión (es decir, 50 días  después de Pascua). La semana anterior a la Pascua de Resurrección es la Semana Santa, que comienza con el Domingo de Ramos (que conmemora la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén). Hacia atrás, los 40 días que preceden a la Pascua son establecidos como la Cuaresma, y desde el 6 de enero (Día de Epifanía) hasta el primer día de la Cuaresma en el Miércoles de Ceniza durará el Tiempo de Epifanía. La fecha de celebración de la Pascua de Resurrección varía entre el 22 de marzo y el 25 de abril, ya que tiene lugar el domingo siguiente a la primera luna llena de la primavera del hemisferio norte.

Símbolos del Tiempo de Pascua

Un símbolo de la Pascua de Resurrección es el Huevo de Pascua, en cuanto se entiende que en la cáscara del huevo se esconde la vida que está latiendo dentro. Cuando ella se quiebra, nace una nueva vida. De la misma manera, la vida “nace” con la muerte y resurrección  de Jesús. Otro símbolo es por supuesto la cruz: Cruz con el Cristo (Crucifijo) y los Clavos, para enfatizar en la crucifixión el viernes santo; Cruz Vacía y Sepulcro Vacío para enfatizar en la resurrección de Cristo.

Color del Tiempo de Pascua

El color litúrgico para el tiempo de Pascua es el Blanco, realzando la santidad y amor de Dios para con toda la humanidad, al haber dado a su propio Hijo para morir por nosotros.